HISTORIA
Traje del 2007 Corría el año 1.703 cuando en Sevilla se destacaba la
costumbre de los rosarios populares, que se realizaban procesionalmente por las
calles, donde despuntaba un sacerdote Capuchino de profunda devoción Mariana,
aquel religioso de nombre Isidoro de Sevilla, inspirado por su ferviente
espíritu Mariano, seguramente concibió mediante una revelación o un sueño
providencial, la imagen de la divina Pastora. Este, salió un buen día en busca
de su hermano para que lo acompañase a una diligencia, así como para que le
pagara una obra que deseaba contratar al renombrado artista Miguel Alonso de
Tovar de la Escuela Pictórica Sevillana.
El Padre le hizo al artista la siguiente descripción: “En el centro y bajo
la sombra de un árbol, la virgen santísima sédente en una peña, irradiando de
su rostro divino amor y ternura. La túnica roja, pero cubierto el busto hasta
las rodillas, de blanco pellico ceñido a la cintura. Un manto azul, terciado al
hombro izquierdo, envolverá el entorno de su cuerpo, y hacia el derecho en las
espaldas, llevará el sombrero pastoril y junto a la diestra aparecerá el báculo
de su poderío. En la mano izquierda sostendrá al niño y posará la mano derecha
sobre un cordero que se acoge a su regazo. Algunas ovejas rodearán la Virgen,
formando su rebaño y todas en sus boquitas llevarán sendas rosas, simbólicas
del Ave María con que la veneran…”